Esta es una de esas recetas que me encantan, adoro meter las manos en la masa.
A mi me parece una receta sencilla, pero llega un momento en que ya no se si he perdido el norte y todo es mas complicado de lo que creo.
Si te impone el tema del amasado, no lo dudes, usa las herramientas que dispongas: maquina amasadora, palas de amasar de la batidora, lo que tengas, que para eso están, para ayudarnos.
Ingredientes:
400 gr. Harina.
100 ml. Aceite.
125 ml. Agua tibia.
45 gr. Levadura panadero.
Sal fina.
Opcional: Sal en escamas y
Sésamo
Como
siempre medimos y pesamos todos los ingredientes, los ponemos en el banco de
trabajo para empezar la receta.
En
un bol desmenuzamos la levadura y la disolvemos en el agua tibia.
Seguidamente
añadimos el aceite.
Añadimos
la sal fina a la harina y la incorporamos al bol.
Ahora
nos quitamos los anillos y procedemos a unir todo los ingredientes con las
manos, o si preferís con una espátula o las palas de amasar de la máquina,
hasta formar una masa uniforme que no se pegue en las manos.
Hacemos
una bola y la dejamos reposar tapada durante 2 horas o hasta que doble su
volumen.
Pasado
este tiempo procedemos a realizar nuestras rosquillas, primero amasamos la
bola, y cortamos en porciones de tamaño al gusto, a mi me gustan largas y
finas, pero cada cual que haga lo que quiera, incluso planas.
Para ello untamos de aceite las zona de la
encimera donde vamos a trabajar.
Precalentamos
el horno a 180º
Cogemos
una porción y empezamos a rodarla por la zona aceitada como si estuviésemos
usando plastilina. Presionamos a la vez que rodamos hacia delante y atrás.
Cuanto mas larga la queramos… rodaremos mas y mas.
Una
vez alcanzado el largo y grosos deseado, distribuimos las rosquillas en la
bandeja del horno dejando espacio entre ellas para que no se peguen.
Introducimos
la bandeja en el horno y bajamos la temperatura a 160º, horneamos unos 25’-35’
dependiendo del grosor, o hasta que estén doradas.
Seguimos
el mismo proceso hasta terminar con la masa, pero además les podemos dar un
toque personal:
Si
las queremos saladitas, las podemos pintar con agua y añadir escamas de sal, de
esta forma la sal se quedará pegada.
Si
os gusta el sésamo o las pipas, podemos añadir un puñadito antes de moldear, de esta forma las semillas se distribuirán por dentro y fuera de la
rosquilla.
Una
vez horneadas, las dejamos enfriar y listas para comer. Ya sean solas,
acompañando ensaladillas, de aperitivo, merienda…
Recuerdo de llevar una bolsita de rosquillas al cole para comer el recreo,
dependiendo de la panadería podían tener diferentes sabores, todas buenisimas.
Nota:
Para
hacer esta receta he preguntado a mi madre, por supuesto, pero como son de esas
recetas de toda de vida y las medidas son a ojo de buen cubero… ya sabéis, de
esas recetas con medidas como: “un got”
o “la harina que admita” (me dejan perpleja)
Así
que he ido a visitar otros blogs para hacer bien la receta. Los dos blog que he
consultado son estos:
http://recetastradicionalesdecocina.blogspot.com.es/2013/10/receta-de-rosquilletas-valencianas.html
de Francesca Bautista.
Gracias
chicas por vuestra publicación.
Me encantan, me encantan y me encantan.... Besitos.
ResponderEliminarMari Carmen, a mi también! Está muy ricas.
EliminarGracias por tu visita y comentario.
Besos y abrazos.
Me han encantado las rosquilletas, enhorabuena sigue así, un beso.
ResponderEliminarLAS DELICIAS DE MAYTE
Gracias por tu visita y comentarios Mayte, tan amable como siempre.
EliminarBesos y abrazos.
Que ricas te quedaron muy bien se ven crujientes bsss
ResponderEliminarHola Nati,
Eliminarsi que están crujientes y duran varios días.
Gracias por tu visita y comentario.
Besos y abrazos
Me encanta como te salieron eres una artista , seguro que están mas buenas que las de los hornos como lo de casa no hay,muchos besos de LAS RECETAS TRADICIONALES DE COCINA.
ResponderEliminarHas visto Francesca,
EliminarHan salido riquísimas. No hay nada como los productos hechos en casa.
Muchas gracias por tu ayuda, por venir a ver el blog y por tu comentario.
Besos y abrazos.
Pues yo soy de las que devoraba rosquilletas en el recreo en el cole, siempre. De pequeña, era más de bocadillo, pero en casa nunca faltaban. Te han quedado mejor que las de panadería y lo de "a ull", es cierto, es complicado hacer una receta para las que no estamos acostumbradas a ese método de nuestras madre y abuelas.
ResponderEliminarMe las llevo. Yo tengo unas planas en el blog, pero recuerdo que me quedaron blanditas, no sé si por la humedad. B7s
Hola Marisa,
EliminarMi madre ya me está diciendo: ¿Como es que es que no las has hecho integrales?
Así que la próxima integrales, voy a ver las tuyas planas y a ver que se me ocurre.
Muchas gracias por tu visita y comentarios.
Besos y abrazos.
¡¡Felicidades por la receta!! en SdeSabor el próximo 15 de julio celebramos nuestro primer aniversario de nuestro blog. Para celebrarlo queremos hacer un regalo a nuestros seguidores por su fidelidad. Os animamos a que participéis en el sorteo, tenéis de tiempo hasta el 15 de julio. Visitar www.sdesabor.blogspot.com
ResponderEliminarGracias por tu visita.
EliminarPues tiene muy buena pinta, como las que hacia mi padre en el horno, me armo de valor y las hago un día de estos y te digo, ademas con sal son indispensables para la ensaladilla. Ahh, el aceite y el agua la media pero la harina la tiraba a la maquina y adelante!! bss.
ResponderEliminarHola Fernando,
EliminarEspero que te decidas y hagas la receta de tu padre... y llores los primeros bocados a descubrir el sabor exacto de tu infancia y luego, las disfrutes con la alegría y satisfacción de la receta bien hecha.
Gracias por tu visita y comentario,
Besos y abrazos.
Ay!!! que ricas Eva, estas las hago yo, ya te cuento guapa. Bs.
ResponderEliminarHola Estela,
EliminarSi por favor, cuéntame como te salen.
Besos y abrazos